sábado, 30 de noviembre de 2013

Alcaldes de VIII Region denuncian la sequía que afecta a su población sin tocar las forestales

Este jueves alcaldes de diversas comunas de la región arribaron a Concepción en busca de un encuentro con el el Intendente Victor Lobos, quien no les había dado audiencia cuando se la solicitaron. A la prensa declararon que la sequía que sufren las poblaciones que representan ya es insostenible para el presupuesto de sus municipios, por lo que requieren de mayores recursos y planes para superar esta situación.
No obstante, el discurso de los ediles y el de los medios de comunicación que reprodujeron este hecho, adolescieron de una omisión gravosa para la credibilidad de sus intenciones de velar por el bienestar común y de informar. La omisión fue de los factores que provocan la sequía que se expande por diversas localidades, que según los alcaldes suman 392.
El consumo de agua que tienen las plantaciones forestales de pinos y eucaliptos y la dificultad en que deja al suelo para poder absorber agua, constituye el factor más determinante en la sequía de las zonas afectadas. De hecho, todas las comunas están emplazadas en medio de grandes extensiones de plantaciones forestales y sus habitantes han visto como el aprovisionamiento hídrico ha disminuido de forma inversamente proporcional a su expasión. 
Las razones que sustentan este planteamiento radican en que:
-Los monocultivos forestales agrupan unos 1.600 árboles de la misma especie por hectárea, plantados al mismo tiempo. Durante el periódo de crecimiento, los árboles necesitan de grandes cantidades de agua para sus procesos de crecimiento, que cuando llega a las hojas para la fotosíntesis, se evapora. Investigadores han afirmado que un eucalipto de tres años de edad consume 20 litros de agua diarios y uno de 20 consume 200. Si a este diagnóstico agregamos que los árboles que actualmente plantan son de rápido crecimiento y modificados genéticamente para ello, un monocultivo forestal podría asemejarse a un terreno lleno de bombas extrayendo agua. 
-El suelo sufre daños por diversos factores, entre ellos:
a.-la aplicación de pesticidas, herbicidas y fungicidas que impiden el desarrollo de especies distintas a los árboles de la plantación. De este modo, en una plantación sujeta a manejo la superficie no recobra materia orgánica.
b.-la compactación del suelo, provocada por el paso de vehículos o por la inexistencia de materia orgánica, hace muy difícil la retención de agua para proveer las napas subterráneas y posteriormente los cursos de agua. 
c.-la erosión generada después de las talas rasa, cuando el suelo queda abosolutamente descubierto y expuesto al paso de la lluvia y el viento. Esto hace que, en una pendiente (presentes en todo nuestro territorio) se pierdan grandes cantidades de suelo, cayendo a la cuenca hidrográfica. Al perder suelo, también pierden la capacidad de retener y absorber agua. 
Omitiendo estos elementos, las autoridades y los medios de comunicación, abordan la grave situación de la población sin ninguna perspectiva que ofrezca una solución. Y la razón es que su búsqueda implica conflictuar con el gran empresariado forestal.
Foto de Archivo: Campesinos de Santa Juana, amenazados por la expasión del monocultivo forestal. 

jueves, 28 de noviembre de 2013

Semillas por dolares: La privatización de las semillas avanza sobre América Latina

Según las leyes en trámite en Argentina y Chile, una empresa o bien puede registrar una variedad ya existente -pero no inscrita en el registro-; o bien hacer una ligera mejora a esa semilla para poder registrarla. El activista Esteban Bruna, miembro de la Red Semillas Libres de Chile, señala que otro defecto de la ley es que se habla de estabilidad, novedad y homogeneidad como requisito para el registro de nuevas variedades, pero no se plantean criterios de calidad. Nada asegura en la normativa que se vaya a velar por la selección de las semillas más apropiadas para la alimentación humana.
Por  Nazaret Castro 
 Fotografía: Luis Acosta/AFP/Getty Images
semillas america latinaEl campo colombiano inició, recientemente, un paro masivo que pronto se ganó el apoyo de la opinión pública urbana. Una de sus reclamaciones era acabar con la Resolución 970, que obligaba a los campesinos a utilizar exclusivamente las semillas certificadas, esto es, las patentadas por las empresas del sector del agronegocio. Paralelamente, el documental 970, de Victoria Solano, denunciaba la injusticia cometida contra unos pequeños agricultores del departamento del Huila, en el interior del país, a quienes se requisaron 70 toneladas de semillas de arroz no certificadas. Los campesinos, algunos de ellos judicializados, reclaman que nadie les avisó de la norma. Muchos colombianos se enteraron a través de esa película de que, en Colombia, regalar o intercambiar semillas es un delito.
La ya famosa Resolución 970 -hoy suspendida debido a la presión social- es la reglamentación de una ley, aprobada en 2012, por la que Colombia suscribe el último acuerdo de la Unión para la Protección de Obtenciones Vegetales (UPOV). Las organizaciones sociales y campesinas aseguran que esta legislación llegó como imposición del Tratado de Libre Comercio (TLC) firmado con Estados Unidos, pero las autoridades del Instituto Colombiano de Agricultura (ICA) han tachado de “tendenciosa” esa información.
La UPOV es una organización internacional con sede en Ginebra que asume como misión “proporcionar y fomentar un sistema eficaz para la protección de las variedades vegetales, con miras al desarrollo de nuevas variedades vegetales para beneficio de la sociedad”. El esfuerzo de esta entidad se ha encaminado en este medio siglo a salvaguardar los derechos de propiedad intelectual sobre las llamadas obtenciones vegetales -esto es, las semillas- a través de un sistema de registro similar a las patentes. La UPOV ha impulsado tres acuerdos desde su creación de 1961, pero es la versión de 1991 -que han aprobado ya los países de la Unión Europea- la más restrictiva en este sentido.
Los movimientos sociales y campesinos de América Latina, muchos de ellos englobados bajo el paraguas internacional de la vía campesina, cuestionan el avance en la región de normativas que limitan el libre acceso a las semillas, obligando a los productores a comprarlas en el mercado formal. Brasil y Paraguay ya han adoptado legislaciones que obligan a los agricultores a pagar regalías a las empresas por el uso de sus semillas; en Argentina y Chile, sendos proyectos de ley se encuentran en trámite parlamentario. En Chile, como en Colombia, la aprobación del UPOV 91 fue una condición del TLC firmado con Estados Unidos. Gracias a la movilización social, los trámites están parados y 21 de los 38 senadores chilenos se han comprometido a no aprobar la ley que, aunque todavía desconocida, es profundamente impopular por los desequilibrios que crea entre los derechos de los agricultores y los de los llamados obtentores. Algo muy similar ocurre en Argentina, donde la Campaña NO a la Privatización de las Semillas ha reunido más de diez mil firmas contra la llamada Ley Monsanto, que se encuentra también en trámite parlamentario.
Propiedad intelectual
El argumento principal de los defensores de este tipo de leyes -como la Asociación de Semilleros de Argentina,ASA- es que el mundo requiere innovaciones tecnológicas que garanticen un mayor rendimiento por hectárea de los cultivos, para satisfacer una demanda creciente de alimentos. Las empresas consideran sustancial una normativa que controle el mercado de semillas a fin de garantizar la recuperación de las inversiones por parte de las compañías. Similares argumentos arguyen los gobiernos: los avances tecnológicos redundan en el bien común y para ello es necesario respectar la propiedad intelectual: “Lo lógico es que todo el desarrollo que hacen tanto el Estado como empresas privadas tengan un respaldo en el resguardo de esa propiedad intelectual”, en palabras del ministro de Agricultura argentino, Norberto Yauhar.
El problema es qué derechos se están salvaguardando en detrimento de cuáles no. El artículo primero del Convenio UPOV 91 define como obtentor a quien descubra una nueva variedad vegetal, esto es, una nueva semilla. Pero los pequeños agricultores llevan siglos, milenios seleccionando semillas; es ese saber ancestral el que ha garantizado la diversidad, calidad y resistencia frente a las plagas de las semillas actuales. Para la ley, sin embargo, nueva es cualquier especie que no se haya registrado hasta la fecha. Camila Montecinos, de la organización Grain, concluye que “registrar (una variedad) como propia equivale a un robo, a la apropiación de una obra ajena”; o, en palabras del investigador Juan Fal, “la privatización de un patrimonio colectivo”.
Según las leyes en trámite en Argentina y Chile, una empresa o bien puede registrar una variedad ya existente -pero no inscrita en el registro-; o bien hacer una ligera mejora a esa semilla para poder registrarla. El activista Esteban Bruna, miembro de la Red Semillas Libres de Chile, señala que otro defecto de la ley es que se habla de estabilidad, novedad y homogeneidad como requisito para el registro de nuevas variedades, pero no se plantean criterios de calidad. Nada asegura en la normativa que se vaya a velar por la selección de las semillas más apropiadas para la alimentación humana.
Amenazas sobre la vida 
El mercado global de semillas implica además un peligro para la biodiversidad, pese a las advertencias de la FAO: aunque las sociedades humanas conocen 10.000 especies vegetales para producir alimentos, en la actualidad apenas doce cultivos proporcionan el 80% de la energía alimentaria; el 60% procede exclusivamente del trigo, el arroz, el maíz y las patatas. La pérdida de biodiversidad no implica sólo una pérdida de riqueza nutritiva, gastronómica y cultural, sino también un grave riesgo sobre la seguridad alimentaria. “La biodiversidad es un seguro frente al cambio climático, en un contexto de incertidumbre en que no podemos saber qué especies reaccionarán peor o mejor en un futuro”, explica Esteban Bruna.
A esto se añaden los riesgos sobre la salud y el medio ambiente que implican los agrotóxicos utilizados en los pesticidas que las multinacionales venden en un paquete junto a sus semillas. Es el caso de la célebre soja Roundoup Ready, resistente al glifosato, que avanza sobre los campos de Argentina, Paraguay, Brasil y Bolivia. Un juicio pionero sentó en el banquillo en 2012 a los responsables de las fumigaciones, tras la intensa movilización de las Madres de Ituzaingó, un barrio de la periferia de Córdoba (Argentina) que experimentó un aumento de los casos de cáncer y malformaciones genéticas atribuido al glifosato.
Queremos libertad para decidir qué producimos y qué queremos comer”, defiende la Asociación para el Desarrollo Campesino (ADC) de Pasto (Colombia). Porque quien tenga el control de las semillas, controlará la alimentación y, en definitiva, la vida humana. Los riesgos se tornan amenazas mientras se consolida el oligopolio: según un reciente estudio del Grupo ETC, seis firmas transnacionales (Monsanto, DuPont, Syngenta, Bayer, Dow y BASF) controlan el 60% del mercado comercial de semillas y el 100% de las semillas transgénicas; ostentan además el 76% de las ventas globales de agroquímicos y el 75% de toda la investigación del sector privado sobre la agricultura. Son empresas que ya venden sus semillas al doble o el triple del precio de las variedades tradicionales, por lo que los agricultores anticipan un incremento generalizado en el precio de los alimentos.
En Chile, Colombia y Argentina aumenta la oposición contra un marco legal que se entiende como un intento de apropiación de un patrimonio colectivo y vital para la vida humana. “Tenemos que mirar hacia formas de vida que no se basen exclusivamente en la maximización de la ganancia a cualquier precio”, dicen las Madres de Ituzaingó. Seguramente, un importante paso adelante será comprender que la vida -el agua, las semillas- no tienen un precio en dólares.

Fuente: www.esglobal.org-www. mapuexpres.org

miércoles, 27 de noviembre de 2013

Cosechas indígenas ayudarían a la seguridad alimentaria

A nivel mundial, las papas cuentan con alrededor de 4.500 variedades, de las cuales 3 mil se encuentran sólo en Perú. Así, y numéricamente hablando, la diversidad genética de la papa puede impresionar, pero no es la más variada. Individualmente, los tomates y las manzanas reclaman un estimado de 7,500 variedades cada uno.
Danielle Nierenberg
Danielle Nierenberg
Sin embargo, pese a la gran cantidad de recursos y una tendencia hacia la estrategia, los cultivos básicos han puesto en peligro la diversidad, dejando a muchos de estos recursos genéticos extintos.
Para el grupo de expertos con sede en EE.UU., Food Tank, la diversidad de cultivos y la conservación juega una parte importante en el objetivo central de la organización, el promover la seguridad alimentaria y un mundo sustentable.
La co-fundadora del grupo, Danielle Nierenberg, habló con Portalfruticola.com sobre la importancia de las especies de cultivos indígenas para promover las normas sociales, económicas y ambientales.
“Los cultivos indígenas y sus vegetales son un área de enfoque grande para nosotros. Esto ha sido, en gran medida, mediante nuestra colaboración con la Christensen Fund en EE.UU., que está muy interesada en el papel que los cultivos autóctonos y tradicionales pueden jugar en la seguridad alimentaria, la generación de ingresos y la preservación de la cultura y la biodiversidad”, dijo Nierenberg.
Y es que la preferencia económica por cultivos de productos básicos como el maíz, el trigo y el arroz ha desalentado la inversión en cultivos tradicionales, explicó Nierenberg.
Aunque los cultivos locales pueden promover la seguridad alimentaria regional, muchas de estas variedades han desaparecido. La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) estima que alrededor del 75% de los recursos fitogenéticos del planeta se han extinguido, mientras otro tercio se podría perder en 2050.
“Las comunidades de financiamiento realmente se han centrado en cultivos básicos de almidón. Hemos estado bien al invertir en alimentos que entregan a la gente una gran cantidad de calorías, pero no hemos sido buenos inviertiendo en alimentos que tienen micronutrientes esenciales o cosas que realmente hacen que los cultivos básicos de almidón tengan buen sabor”, dijo.
“Creo que eso va a cambiar, sobre todo a medida que los impactos del cambio climático se hagan más evidentes y algunas de estas variedades de cultivos más convencionales no sean capaces de resistir la fluctuación de la temperatura y la precipitación”, agregó.
Ya se trate de una hoja verde como el amaranto o el ensete “falsa banana“, Nierenberg explicó que la promoción de la comida local puede fomentar la autonomía nutricional y aliviar la presión de las plagas y enfermedades de los cultivos.
“Si nos fijamos en las cosas que funcionan, ya sea de cultivos intercalados o sistemas perennes o permacultura, creo que los sistemas alimentarios del futuro buscarán lo que se adapte a su clima y a las tradiciones culturales para desarrollar nuestro sistema de alimentos en formas que protejan la biodiversidad y proteger la identidad cultural que estos cultivos pueden proporcionar a las comunidades”, dijo.
Nierenberg utilizó el ejemplo del ensete, una fruta indígena de Etiopía que ha sido en gran parte ignorada por los inversores externos.
Agricultor en un campo de ensete
Agricultor en un campo de ensete
“El cultivo de ensete tiene un potencial increíble. Pero cuando las agencias de desarrollo, financistas y los donantes van a Etiopía, tratan de presionar a los agricultores para sembrar cultivos de productos básicos”.
“Si realmente nos fijamos en la agricultura, podemos verlo no sólo en términos de su producción económica, sino para todas las otras cosas que hace como contribución a la biodiversidad, ayudando a la salud de los suelos, la conservación del agua”.
“Necesitamos un sistema que vea estas cosas y les de valor. Hasta que eso suceda, temo por el futuro de la agricultura, particularmente en el mundo en desarrollo. Los agricultores son presionados a cultivar cosas que podrían tener un retorno económico importante en el corto plazo, pero a menudo en el largo plazo no lo hacen”.
Más allá de la preservación de los alimentos tradicionales, Nierenberg explicó que muchos pequeños agricultores sufren la falta de apoyo institucional para hacer, verdaderamente, frente  a sus necesidades.
“Creo que lo más importante, si estás centrándote en el África subsahariana, es que los gobiernos de la región no están invirtiendo en la agricultura, a pesar de que a menudo constituye una gran parte de su PIB. Realmente necesitamos tener gobiernos que inviertan en pequeñas y medianas explotaciones agrícolas, para que los agricultores puedan obtener los recursos que necesitan”, dijo.
“Esas cosas tienen que estar en su lugar para que el sistema de alimentos sea verdaderamente sostenible”.

lunes, 25 de noviembre de 2013

Comunidades mapuches del sur manifiestan su oposición a la "Ley Monsanto"



Comunidades mapuches del sur se reunieron a intercambiar semillas en San Juan de la Costa, en un acto cultural que se desarrolló en la localidad de Huamputúe y que estuvo marcado por la oposición de las comunidades a la “ley Monsanto”.
Comunidades indígenas desde Tirúa y Lumaco por el norte hasta Quellón por el sur, se reunieron este domingo en la localidad de Huamputúe, comuna de San Juan de la Costa, en el Primer Trafkintu del Territorio Kunko con el objetivo de recuperar la práctica ancestral del intercambio de semillas.
Cerca de 250 personas compartieron sus saberes y productos de cada una de las zonas representadas en un acto que tuvo mucho de cultural pero también un importante componente político a raíz de la tramitación en el Senado de la Ley de Obtentores Vegetales, más conocida como Ley Monsanto.
Marcelo Cheuquián, presidente de la comunidad indígena Ñuke Mapu de Huamputúe, organizadora del Trafkintu, señaló que “el evento principal es el trafkin de semillas, pero pensamos que la gente también tiene que intercambiar otras cosas que hacen cotidianamente como mermeladas, artesanías, productos del mar, pero también sus historias, ideas y formas de vivir la vida”.
Tras el almuerzo comunitario, amenizado por grupos musicales de los distintos lugares que se hicieron presentes, vino el turno del Nutram o conversación sobre los temas de contingencia que afectan al mundo mapuche huilliche, como las concesiones mineras y de aguas, así como la ley que regula el cultivo de semillas.
Juan Arriagada Pérez, técnico agrícola y conocedor del proceso legislativo que llevó en 2009 a la aprobación de la Ley de Obtentores Vegetales en la Cámara de Diputados, comentó que “la primera consecuencia de esta ley es que aparte de privatizar las semillas, criminaliza guardar semillas de un año para otro, lo que ha sido una práctica ancestral de los pueblos originarios”.
La concejala de San Juan de la Costa Prosperina Queupuan ha sido una de las principales opositoras a esta ley públicamente. Para ella, quien nació en la comunidad Ñuke Mapu de Huamputúe y fue la impulsora de este encuentro, llegó el momento de revalorar la práctica ancestral de la siembra y guardar sus semillas en las comunidades para hacer sentir su voz respecto a los transgénicos y la ley Monsanto.
“Vamos a exigir el respeto y el derecho que tienen los pueblos. Nuestra comuna tiene más de un 80% de población huilliche, por lo tanto tenemos una voz que dice que queremos mantener nuestras costumbres, queremos seguir cultivando nuestra cultura y el Estado tendrá que escucharnos y es por eso que nos unimos en una sola voz”, enfatizó la concejala Queupuan.
Los organizadores concordaron en que el evento fue exitoso desde el punto de vista de la convocatoria ya que se logró reunir a comunidades de gran cantidad de comunas de la zona sur, así como también se pudo conversar e informar a las comunidades el estado de avance de los proyectos de ley y concesiones que los afectan.

¿Por qué Monsanto es la peor compañía sobre la faz de la tierra?





¿Qué hace Monsanto? Monsanto es una de las multinacionales que abarca el mercado alimenticio, usa una serie de semillas transgénicas para sus cultivos y también abarca el mercado global de pesticidas. Monsanto ha sido criticado también por limitar la variedad de semillas, y por lo tanto cultivos en el mercado, más lamentablemente ninguno de estos ejemplosno se compara a otras de las acciones y creaciones en las que ha estado involucrada la multinacional:
1. Monsanto estuvo involucrada en la creación de la primera bomba nuclear en la Segunda Guerra Mundial y operó una planta nuclear en la década de los ochenta para el gobierno estadounidense.
2. En 1944 Monsanto inició con la creación de DDT, un pesticida que después se prohibió en Hungría en 1968, Noruega y Suecia en 1970, Estados Unidos en 1972. Durante la Convención de Estocolmo en el 2004 se prohibió su uso general, ya que se acumula en tejidos grasos y en la leche y causa daños irreparables en los riñones e hígado.
3. Durante la Guerra de Vietnam, Monsanto fue una de las 7 compañías que le dieron Agente Naranja al gobierno de Estados Unidos (sin embargo su fórmula era cien veces más fuerte que las demás) como parte de su programa de Guerra Química. El gobierno de Vietnam estima que a causa del Agente Naranja murieron 400,000 personas y en los años siguientes medio millón de bebés nacieron con defectos.
4. Somatotropina bovina (abreviado como BST), es una hormona de crecimiento artificial ampliamente utilizada en Brasil, Estados Unidos y México. Ha sido prohibida en el resto del mundo ya que se ha ligado con problemas de salud (cómo cáncer). La hormona es utilizada por Monsanto.
5. El uso del aspartame fue aprobado en 1974 y para 1998 era el causante principal de quejas relacionadas a los aditivos. El edulcorante no calórico causa dolores de cabeza, diarrea, cambios de humor, vomito etc. también se ha ligado al cáncer y diabetes. Monsanto fundó la compañía a NutraSweet en 1980 y gozó el monopolio de los venenosos endulzantes sin calorías unos años.
6. Desde la década de los noventa la variedad en semillas (y cómo consecuencia en cultivos) ha disminuido un 90% ya que Monsanto se ha dedicado a comprar todas las semillas y vender exclusivamente las que ellos han manipulado genéticamente. El problema con esto último es que no sólo han comprado gran parte de las semillas orgánicas, sino han estado comprando a las compañías que venden semillas y así han reducido el número de semillas —por lo tanto comida.
7. La solución de Monsanto a la muerte de abejas no fue analizar y renovar sus tóxicos métodos de cultivo. Estos son demasiado nocivos para la fauna que poliniza las plantas por lo que han afectado ecosistemas enteros. En vez se han enfocado en un acercamiento completamente anti-natural: abejas biónicas.
Entonces: ¿Es Monsanto la peor compañía del mundo? Es probable que así sea, pero esto es en gran parte porque lo permitimos y hasta lo alentamos al comprar sus productos en vez de apoyar a productores locales y orgánicos. El problema con Monsanto es que es difícil detectar sus cultivos, no vemos en el supermercado jitomates o manzanas que dicen Monsanto. Para evitar comer sus productos (o los de las otras multinacionales como Cargill, Halliburton, Bechtel, o De Beers) hay que enfocarnos en consumir sólo productos orgánicos. Los alimentos procesados indudablemente tendrán algún producto/ingrediente transgénico, criado y formulado reteniendo químicos y pesticidas. Algunas de las marcas que utilizan productos Monsanto, que deberíamos evitar a toda costa son:
lista monsanto
fuente el ciudadano,cl

sábado, 9 de noviembre de 2013

Declaración Pública por Proyecto de Ley Monsanto


monsanto
Organizaciones ciudadanas y campesinas demandan a los candidatos que expresen claramente su postura ante el Proyecto de Ley de Obtentores Vegetales (conocido como Ley Monsanto) que actualmente está en trámite en el Senado.
Este proyecto de ley que reemplazaría a la ley nº 19.342 y que pretende legislar en materia de obtenciones vegetales y derechos de propiedad sobre plantas y semillas, según las organizaciones es una ley que amenaza la biodiversidad, la soberanía alimentaria y la agricultura familiar campesina, entre otros/as.
A continuación, el texto completo del comunicado:
Las organizaciones abajo firmantes solicitamos a los/as candidatos/as a la presidencia y al senado a pronunciarse de manera urgente al respecto, exponiendo una postura clara y argumentada antes de estas elecciones, pues será determinante para el voto responsable y consciente de la ciudadanía.
Así mismo, declaramos:
Estar en defensa y a favor de la conservación de la biodiversidad tanto silvestre como cultivada y del conocimiento ancestral de las comunidades de los pueblos originarios y campesinos que tras siglos hemos trabajado la tierra mejorando y diversificando las semillas con nuestra sabiduría, nutriéndonos con alimentos limpios y sanos, libres de agroquímicos y de modificaciones genéticas.
El Estado chileno, en lugar de impulsar leyes innecesarias que perjudican la producción de sanos alimentos, debería abocarse a proteger la biodiversidad e impulsar la defensa del patrimonio genético nacional apoyando a pequeños agricultores, orgánicos y ecológicos, a organizaciones campesinas y socio-ambientales en el cuidado y difusión de variedades nativas y de las de semillas tradicionales o criollas (aclimatadas) existentes, liberando el flujo de semillas para refrescar en forma permanente los cultivos y fortalecer así la diversidad y variabilidad de las semillas. Fortaleciendo a su vez una red autónoma de cuidadores/as ecológicos (cultivos libres de químicos) de semillas y saberes, para ser difundidas y compartidas entre agricultores/as. Estas semillas deben ser consideradas como de uso y dominio público, no sujetas a privatización.
No estamos de acuerdo con esta ley que da nuevas atribuciones y garantías para que las empresas (obtentores) sigan aumentando sus registros de semillas “certificadas”, “híbridas” o “mejoradas” y expandiendo la monopólica industria agroquímica. Ello constituye una amenaza de apropiación del patrimonio natural y biológico con fines de lucro por parte de empresas transnacionales particulares, gobiernos, institutos o universidades. Los nuevos “derechos de obtentor” contenidos en esta ley liquidan los derechos ancestrales de los campesinos a guardar la semilla, intercambiarla y disponer libremente del producto de su cosecha. De ser aprobada la ley, los obtentores podrán ejercer acciones judiciales contra quienes sean acusados de usar libremente esa semilla. Nos oponemos tajantemente a aquello.
No admitimos la expansión de monocultivos, ni de semilleros transgénicos de exportación por que atentan contra la vida, los ecosistemas, el bienestar y el desarrollo de generaciones futuras. Sostenemos que los cultivos transgénicos no deben coexistir con los cultivos agroecológicos u orgánicos por el peligro de contaminación derivado de aquellos, pues ha sido comprobado en episodios como la contaminación del maíz y de la miel por transgénicos. Así mismo, cualquier alimento que contenga transgénicos debe llevar un rótulo que lo identifique (etiquetado) para hacer efectivo el derecho del consumidor a elegir libremente cómo alimentarse.
Llamamos enérgicamente a la población a informarse, generando opinión e intercambio al respecto. Consideramos necesaria la articulación unificadora de los ciudadanos/as y campesinos/as en una acción creativa y educativa por la defensa del patrimonio natural y cultural que representan las semillas nativas y criollas para difundir y dinamizar las variedades campesinas existentes, facilitando su permanente evolución y adaptación,
Acordamos trabajar para que las semillas, el suelo y el agua, bases de la soberanía alimentaria, vuelvan a pertenecer al dominio público como pilares que sustentan la vida en la Tierra.
Finalmente, afirmamos que las semillas no pueden pertenecer a nadie en particular ni ser parte de un registro estático. Deben estar en manos de quienes las siembran, en manos campesinas estableciendo de hecho, legítimamente, que pueden y deben circular libre y dinámicamente, perteneciendo al dominio público.
Invitamos a toda persona que quiera sumarse a esta declaratoria a adherir y compartirla para alcanzar amplia difusión hasta el 15 de noviembre, fecha en que haremos pública la respuesta de los/as candidatos/as o la ausencia de ella.

o Asociación de Agricultores Biológico Dinámicos de Chile (ABDCh)
o Movimiento Agroecológico de Latinoamérica y El caribe (MAELA)
o Red Agroecológica de Chile
o Movimiento en Defensa del Medio Ambiente de la Higuera (MODEMA)
o Slow Food Internacional en Valdivia
o Red de Acción en Plaguicidas Chile (RAP-Chile)
o Campaña Yo No Quiero Transgénicos en Chile (YNQT)
o Iniciativa Exige Vivir Sano
o Greenpeace Chile
o Partido Ecologistas Verdes del Norte
o Colectivo el Pimiento de Vallenar
o Colectivo Informativo Mapuexpress
o Grupo de Trabajo por Derechos Colectivos
o Red por la Defensa de los Territorios
o ONG Cultivos Urbanos
o Agrupación Biosfera
o Cooperativa de Consumo Responsable la Manzana
o Consultora Alerce
o Organización Ciudadana Ambiental de Salamanca (OCAS)
o Red Ambiental del Norte (RAN)
o Ecosistemas
o Ecoprisma
o Centro Cultural Rayen Wekeche
o Comunidad Indígena Lorenzo Huiquivil
o Consejo en Defensa y Restauración del Territorio Elicura
o Red de Turismo Comunitario
o Mapuche Trekean
o Comité Iniciativa Nahuelbuta
o Ética en los Bosques
o Red de Semillas Libres Chile (RSL Chile)

Indígenas valoran sentencia de la Corte Suprema que reconoce sus derechos religiosos y patrimoniales en Cerro Ceremonial Topater


 
Como "una gran victoria" calificaron indígenas likan antai, quechua y aymara la sentencia de la Corte Suprema de 30 de septiembre de 2013, que ordenó la paralización de las obras de construcción de viviendas en el Cementerio Indígena y Cerro Fundición Topáter de Calama, que ha sido tradicionalmente utilizado en ceremonias por los indígenas de Calama. 

De acuerdo a Esteban Araya Toroco, Presidente de la Asociación Indígena de Regantes y Agricultores Lay Lay y perteneciente al Consejo Autónomo Ayllus Sin frontera y  a la Comisión de Resguardo de Sitios Patrimoniales Arqueológicos, “Calama fue construida sobre un ayllu (pueblo Indígena), el cual tenía por cementerio a Topáter, el que es usado aún por los indígenas de la zona como medio de comunicación con nuestros antepasados. Allí yacen enterrados 4 culturas: los Licanantay, Aymaras, Quechuas y Los Urus que provenían del Amazonas. Destruir el cementerio, ponerle encima un conjunto habitacional, dividir el cerro, es atentar contra nuestros derechos religiosos, es dejarnos sin contacto con nuestros ancestros

En el lugar, personas que provenían de Chuquicamata organizadas en la Sociedad Anónima “Inversiones e Inmobiliaria Villa Nueva”, buscaban una solución habitacional promovida por Codelco y autorizada por la Municipalidad. No obstante, de acuerdo a la Ley de Medio ambiente debió haber sido autorizada mediante un Estudio de Impacto ambiental y no mediante una declaración. Asimismo, no hubo consulta indígena, sino una serie de reuniones meramente informativas donde los indígenas poco pudieron opinar.

La Corte de Apelaciones de Antofagasta sentenció contra los indígenas, en virtud de que no dio por probadas afectaciones a lugares patrimoniales de importancia, pese a los informes suscritos por dos arqueólogas  quienes visitaron el lugar, lo fotografiaron y entrevistaron a los indígenas.

La Corte Suprema dio vuelta el fallo, beneficiando a los indígenas. El máximo tribunal señaló que “innegable resulta que tratándose de un cementerio que cobija, al modo silencioso como lo hacen las reminiscencias históricas, innúmeras evidencias no solamente de existencia de vida de personas que habitaron la región en época pre incásica más o menos remota; no solo eso, sino objetos múltiples que dan cuenta de prácticas, usanzas y/o costumbres propias de un apogeo cultural de etnias cuyos actuales representantes consideran, como parece natural a la especie humana, de un valor superior e incluso sagrado, con ribetes de religiosidad precolombina”

Para Araya, “la sentencia reconoce que Calama era un ayllu (Pueblo), una comunidad ancestral, y que el Cerro Topáter forma un conjunto ceremonial con el Cerro Fundición. La Corte Suprema ordenó oficiar a Conadi, quien reconoció la existencia de comunidades actuales en la zona, y ofició al Consejo de Monumentos, y a la Comisión de Patrimonio, que adjuntaron copiosos antecedentes de la existencia del cementerio, de restos en la superficie, y de la afectación del lugar por las obras civiles que se comenzaron a desarrollar ahí, por lo que declaran ilegal y arbitraria la acción de la empresa demandada”.

Para Ariel León Bacián, Presidente de la Corporación Jach’a Marka Aru y miembro de la Alianza Autónoma de Pueblos Indígenas “esta sentencia viene a reconocer la protección de los cerros patrimoniales en favor de los indígenas que los usan ceremonialmente. Los indígenas tenemos un derecho preferente a la utilización de este patrimonio, como representantes de los habitantes del lugar, como herederos de su cultura. Sobre pukaras, cerros tutelares, cerros ceremoniales, guillatuwe, lugares donde hay gñen, tenemos derechos religiosos a no ser perturbados por la construcción de obras de terceros, y que cualquier entorpecimiento, constituye una discriminación arbitraria, discriminación racial y étnica en contra de nuestro derecho a la libertad religiosa, por lo que vemos un verdadero precedente positivo que puede ser replicado en otros lugares que se encuentran amenazados en todo Chile. Recordamos a Pilmaiquén, donde los hermanos mapuche están dando una lucha tremenda por el gñen Kintuante, respecto de los cuales esta sentencia puede ser de una gran utilidad. No será la primera ni la última vez que se nos trate de usurpar nuestro patrimonio, tierras, aguas, semillas, bailes, espiritualidad, todo, por lo que debemos estar atentos”.

En este momento, los indígenas se encuentran analizando la sentencia de la Corte Suprema a efectos de darle correcta aplicación, particularmente en lo que dice relación con la propiedad ancestral que los asiste sobre el lugar, de acuerdo a lo que dispone el Convenio 169 de la OIT.
 
 Anexos: 
 
Copia de la sentencia de la Corte (si aparece clave, hacer click en “Cancelar” y aparecerá el fallo):



FUENTE
Ariel León Bacián
Presidente de la Corporación Cultural Aymara 
Jacha Marka Aru 
Miembro de la Mesa Ejecutiva de Pueblos Originarios Unidos
POU
09-98839821
Twitter:  arielleonbacian
Facebook: Ariel Leon Bacian

viernes, 1 de noviembre de 2013

GUATEMALA : Intervención de Daniel Pascual durante la Audiencia No.149 de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos en Washington


“Buenos días, decirles que venimos en representación de comunidades pueblos y organizaciones que estamos sumamente preocupados por la situación del país. Nosotros venimos a presentar este informe y de entrada queremos reiterar la necesidad del informe de la relatora sobre derechos de los pueblos indígenas de su reciente visita a Guatemala”.

“Contarles que es lamentable nuestra situación, porque salimos de los acuerdos de paz que nos llevó a cerrar la guerra en el país, pero que lamentablemente en este momento estamos viviendo situaciones alarmantes similares a la guerra, hay alrededor de 16 y 17 muertos diarios en nuestro país”.

“Nos preocupa la conflictividad a partir del desarrollo de las políticas de privatización que hubieron y que hay en nuestro país, por los tratados comerciales, por las concesiones mineras, por las concesiones petroleras, y las concesiones de hidroeléctricas”.

“El acaparamiento de la tierra para cultivar palma y caña para agrocombustibles esta llevando a una reconcentración de la tierra general y que a partir de eso se han dado una serie de violaciones de derechos humanos, individuales y colectivos que tienen que ver con la violación y el derecho a ser consultados para estas políticas”.

“La imposición de estas empresas en territorios de pueblos indígenas, estamos hablando de más de 300 licencias de explotaciones mineras, entre exploración y explotación, 119 licencias para proyectos hidroeléctricos y recientemente la creciente criminalización de dirigentes y líderes comunitarios”.

Toda esa criminalización de los defensores de derechos humaos pasa a manos de los juzgados en donde giran órdenes de captura y cuando estos no lo logran, el Organismo Ejecutivo se encarga de hacer estados de sitio en donde, concretamente, se anulan formalmente y de hecho las diferentes garantías constitucionales”.

“Esto ha llevado también, a niveles de asesinatos, amenazas, desapariciones y secuestros como fue el caso de la comunidad indígena Santa María Xalapán.  Y entre otros casos que queremos poner como ejemplo”.

“También, tenemos que decir, que ésta persecución no es sólo penal, sino de hecho por parte de las empresas privadas de seguridad. Hay algunos casos que están siendo procesados en los tribunales. Incluso, ya hay casos en juicio en donde hay penas en contra de  jefes de guardias privados de seguridad”.

“Las agresiones no son sólo éstas, se han dado una serie de acusaciones de ciertos periodistas y columnistas que escriben en diferentes medios de comunicación y es lamentable que en este caso el Estado Guatemalteco les haya aprobado la personería jurídica, como es el caso, de que el ministerio de gobernación haya aprobado la personería jurídica de la mal llamada fundación contra el terrorismo, encargada de una serie de acusaciones hacia diferentes defensores de derechos humanos, derechos individuales y derechos colectivos”.

“En este sentido, queremos decirles que traemos estas denuncias. Las estrategias que usan para agredirnos son diversas, son de hecho, son de grupos paramilitares, son departe del Estado, entre otros, nosotros somos quiénes estamos viviendo esta situación, cada vez más crítica”.

Nota:
Daniel Pascual es coordinador general del Comité de Unidad Campesina –CUC- y miembro de la Convergencia Nacional Maya Waqib Kej. Participó como peticionario en la Audiencia 149 de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos –CIDH- en Washington D.C. referente a la Criminalización de la Protesta Social en Guatemala, porque ha sido calumniado, difamado y señalado falsamente, junto a otros dirigentes populares y defensores de derechos humanos, de crear conflictos sociales, de ser terroristas, entre otras cosas, por el Gobierno, algunos supuestos periodistas y el grupo exmilitar denominado fundación contra el terrorismo.
 
La audiencia se realizó hoy 28 de octubre de 2013 a las 8:15 de la mañana, hora de Guatemala.
 
 
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José G. Cubur. P.
Comunicador Social 
Comité de Unidad Campesina -CUC-

FUENTE: http://farmlandgrab.org